Después de haber tenido muchos problemas con el blog (incluso lo perdí...) puedo publicar una receta. Ante todo quiero agradadecer la ayuda prestada para ello a mi amiga Kisa, ya que sin su ayuda seguiría hoy con un buen disgusto y sin poder publicar... La conozco personalmente y sé que es una persona encantadora, siempre dispuesta a echar una mano. Su blog es archiconocido, no es necesario recalcar que sus recetas, fotos y paso-a-pasos son absolutamente fantásticas.

Y qué mejor manera de agradecérselo que publicar una receta suya (por cierto, riquísima). Ahí va, pues. Un millón de besos, Kisa...







Ingredientes:


225 grs de harina de media fuerza

30 grs de aceite de oliva

75 ml de agua tibia (yo eché un poco más, 110 ml)

3 grs de azúcar

4 grs de sal

Pasta de tomates secos (también receta suya)

Un puñadito de aceitunas negras  deshuesadas partidas

1/2 cucharadita de tomillo (yo añadí alguna que otra espina de romero seco)

21 grs de levadura fresca de panadería (o 7 grs de la seca de panadería)


Elaboración:







Amasado en KitchenAid:


Echamos la sal en la cubeta de la amasadora y encima el resto de ingredientes (desmenuzando la levadura) y amasamos a baja velocidad durante 6 minutos. Subimos un poco la velocidad y repetimos operación durante 3 minutos más.






Tapamos la masa y la dejamos levar durante 30 ó 40 minutos- La desgasificamos con las manos y la trasladamos a una mesa de trabajo enharinada. La estiramos con un rodillo (sin dejarla muy fina), la trasladamos a una bandeja de horno forrada con papel  y la pintamos con la pasta de tomates secos. Hacemos huecos con los dedos de las manos y en cada unos introducimos una aceituna negra partida en dos.. Espolvoreamos la masa con las hierbas y precalentamos el horno a 240º.

Una vez listo el horno, la dejamos cocer, a media altura, durante 15 minutos aproximadamente.